Practicar deportes es una de las aficiones que más satisfacción aporta a una persona; ya sea que lo practique de manera profesional, como afición o como estrategia para mantener un cuerpo sano.
A la vez que tenemos las mejores intenciones a la hora de practicar el deporte, es una realidad que es posible también sufrir algún percance mientras practicamos nuestro deporte favorito. Cuando esto sucede nos toca enfrentar las consecuencias y costos asociados, lo cual puede ser de alto valor, es por ello que aquí te queremos platicar sobre los seguros de accidentes personales para deportistas.
Ahora, existe una opción que es factible y a la vez cómoda; se trata de transferir este riesgo (la pérdida financiera) a una compañía de seguros y así, con solo cubrir un deducible o tal vez ni siquiera eso, tener la seguridad de que alguien responderá en el aspecto económico en el momento que más necesitamos.
¿Cuáles son los seguros están disponibles? y ¿Cuáles puedo y debo comprar para protegerme de los riesgos provenientes por la práctica de deportes?, te responderemos estas preguntas en este artículo.
Para comenzar, debemos hacer una aclaración obligatoria y de suprema importancia; las pólizas generalmente excluyen de cobertura los llamados deportes extremos o peligrosos, como por ejemplo el buceo, paracaidismo, escalar montañas, Bungee Jumping, o similares. Además, generalmente no cubren la práctica profesional de deportes como boxeo, carrera de motos y carros, karate y demás artes marciales. Para estos tipos de deportes, se puede buscar coberturas especialmente diseñadas a través de pólizas especiales o hechas a la medida.
Entonces, ¿cuáles pólizas me pueden servir mientras hago los deportes que normalmente practico?
Te compartimos las más relevantes:
Póliza de vida
Con esta póliza estaríamos cubriendo el riesgo de fallecer durante mi rutina de ejercicios y que puede suceder por diversas razones que tal vez sería muy largo detallar.
Veamos un ejemplo: La persona asiste al gimnasio y luego de una rutina sufre un ataque cardíaco y fallece; o bien está montando bicicleta y sufre un atropello. Son situaciones de la vida diaria que ya hemos oído que han acontecido.
Un seguro de vida le otorgaría la suma asegurada a los beneficiarios que hayan sido designados en la solicitud en un solo pago.
Póliza de accidentes personales
Al igual que el seguro de vida, esta póliza pagaría una suma pactada a los beneficiarios al acontecer un fallecimiento, solo que, por diseño, esta póliza cubre únicamente las muertes accidentales.
Se define accidente como un evento fortuito, externo, violento y ajeno a la voluntad del asegurado y siempre que el evento caiga dentro de esta definición, la compañía haría el pago
A esta póliza se le pueden añadir coberturas interesantes como desmembramiento, incapacidad temporal y también total y permanente, gastos médicos (a consecuencia accidental únicamente) renta diaria y ambulancia.
Este tipo de pólizas tiene sumas aseguradas limitadas y suelen ser complementarias de las pólizas de vida, que, en su diseño de coberturas, cubre la muerte por cualquier razón.
Póliza de gastos médicos y hospitalización
Dependiendo del plan y sus coberturas, cubrirá los gastos provenientes de atenciones médicas por enfermedad o accidente en consultorios o en hospitales y clínicas privadas, los medicamentos recetados, laboratorios y rayos X, operaciones quirúrgicas, operaciones ambulatorias, maternidad, ambulancias, en fin sería la póliza que cubriría de manera más amplia los riesgos de sufrir accidentes o enfermedades provenientes del ejercicio de deportes cubiertos.
Póliza de viaje
Estas pólizas si bien cubren cuando uno sale del país y se termina al regreso del viaje, son muchas veces olvidadas por los potenciales asegurados y que muchas veces otorgan coberturas sin deducibles y sirven para atletas que viajan a participar en torneos o eventos internacionales, o simplemente para el viajero que busca hacer deporte fuera de su país, lo veo mucho con los que practican el ciclismo, el golf, el triatlón y las maratones.
Póliza de responsabilidad civil
¿Seguramente te preguntarás cómo me puede servir una póliza de responsabilidad civil si hago ejercicio o si practico deporte? Aunque la cobertura no abarca a todos los deportes si tiene uno que entender en primer lugar el espíritu de la cobertura, esta póliza cubre los daños materiales o personales que el asegurado pueda causar un tercero realizando su actividad.
Importante aclarar quién es un tercero bajo la lupa de la póliza. Un tercero en seguros es cualquier persona; excepto a los padres, cónyuge e hijos del asegurado, personas que de forma permanente o con relación laboral, convivan en su domicilio. También se excluye dentro de la definición a cualquier persona o ente jurídico que tenga un contrato verbal o escrito con el asegurado.
Habiendo aclarado entonces que es un tercero, les presento unos ejemplos que pueden resultar interesantes:
- Golf, jugando una ronda en su club, el jugador tira la bola sin intención hacia un carro estacionado o una casa adyacente causando daños materiales.
- Una persona montando bicicleta, atropella a un transeúnte, causándole heridas.
- Jugando futbol en una cancha, patean la pelota que se sale del cuadro y golpea a alguien que camina por la acera o bien golpea un carro.
Todos estos son ejemplos de cosas poco probables, pero que pueden suceder y para lo que podemos estar preparados contratando con su corredor profesional, las coberturas disponibles en su país.
Siempre será importante que, una vez sucedido el acontecimiento, su compañía de seguros y su corredor sean notificados oportunamente y así las coberturas contratadas se activen y brinden la protección necesaria en esos momentos.
